El estatus social alto tiene sus privilegios cuando se trata de envejecimiento, incluso en los animales salvajes.
En el primer estudio en su tipo, que implica una especie silvestre, investigadores de la Universidad Estatal de Michigan han demostrado que los factores sociales y ecológicos afectan a la salud animal. Los resultados, publicados en la edición actual de Biology Letters, se centraron en las hienas manchadas de Kenia.