Un nuevo estudio de la NOAA, la National Oceanic Atmospheric Administration, le da un nuevo giro a una espinosa pregunta sobre el impacto del aumento en la producción de petróleo y gas sobre las emisiones de gases de efecto invernadero. Los científicos han detectado un aumento de las tasas de emisiones de metano a nivel mundial desde 2007.
Un nuevo estudio de la NOAA, la National Oceanic Atmospheric Administration, le da un nuevo giro a una espinosa pregunta sobre el impacto del aumento en la producción de petróleo y gas sobre las emisiones de gases de efecto invernadero. Los científicos han detectado un aumento de las tasas de emisiones de metano a nivel mundial desde 2007. Ese repunte se corresponde con el rápido auge de la producción de gas de esquisto y petróleo de esquisto EE.UU. y algunos han elaborado hipótesis de que los dos podrían estar conectados. Pero resulta que la correlación no necesariamente puede ser una causa.
La investigación publicada el miércoles en la revista Nature encontró que, a pesar de anteriores emisiones de metano procedentes de la producción de combustibles fósiles (lo que incluye el carbón, petróleo y gas) se subestimaron significativamente, los aumentos globales de metano en la atmósfera no se deben a la producción de petróleo y gas. La NOAA, que ha medido el metano en la atmósfera desde 1984, dice que el aumento global de metano puede provenir de fuentes microbianas, incluyendo humedales, arrozales y animales útiles en agricultura como vacas. El metano se considera un gas de efecto invernadero más potente que el dióxido de carbono, ya que si bien se descompone más rápidamente que el CO2, atrapa el calor 28 veces más eficazmente a lo largo de 100 años.
Los investigadores recopilaron la mayor base de datos mundial sobre el metano, lo que produjo una imagen más real del número total de moléculas de metano en la atmósfera, así como una visión más clara de donde se originó el metano. Como resultado, los investigadores afirman haber identificado más metano a partir de la producción de petróleo y gas de lo que se pensaba, un aumento del 20 al 60 por ciento. Pero eso no es suficiente para explicar el aumento global del metano en la atmósfera.
Conitnúe leyendo en StateImpact Pennsylvania
Crédito de la imagen: Will von Dauster, NOAA.