Transformar los paisajes naturales en el Caribe en áreas urbanas o agrícolas puede aumentar el riesgo de las personas que mueren por inundaciones y tormentas, sugieren los científicos. En un estudio publicado por Scientific Reports el 08 de julio pasado, los investigadores del Ministerio de Salud de Anguila y la Universidad Católica de Lovaina en Bélgica, investigaron los factores que hacen de la región más propensa a las muertes relacionadas con estos desastres.
Transformar los paisajes naturales en el Caribe en áreas urbanas o agrícolas puede aumentar el riesgo de las personas que mueren por inundaciones y tormentas, sugieren los científicos. En un estudio publicado por Scientific Reports el 08 de julio pasado, los investigadores del Ministerio de Salud de Anguila y la Universidad Católica de Lovaina en Bélgica, investigaron los factores que hacen de la región más propensa a las muertes relacionadas con estos desastres. De 20 variables, encontraron que el destinar una mayor proporción de tierra para la agricultura y aumentar el porcentaje de personas que viven en las zonas urbanas, estaban vinculados de manera consistente con las inundaciones y las tormentas más mortales.
"Conforme los paisajes naturales se transforman en tierras agrícolas, el efecto protector que ofrecen a las poblaciones humanas podrían reducirse en serio" dice José Rodríguez-Llanes de la Universidad Católica de Lovaina y uno de los autores del estudio. Lo mismo ocurre con la urbanización no planificada, dice.
El Caribe es comúnmente afectado por inundaciones y ciclones tropicales. Entre 2000 y 2012, se reportaron 113 de este tipo de desastres en los 15 países que conforman la Comunidad del Caribe (CARICOM), de los cuales 85 causaron muertes, dice el estudio. Esto es más del doble del número vinculado a eventos similares en los últimos 20 años, según dijo.
"Analizamos 32 años de datos de inundaciones y tormentas de los países de la CARICOM, junto con datos de los indicadores de desarrollo del Banco Mundial", dice Rodríguez-Llanes. El análisis proporciona "las primeras ideas no sólo en cuanto a los determinantes más importantes de la letalidad, sino también aquéllos que tienen potencialmente implicaciones de largo alcance en la política", dice el documento.
Continúe leyendo en SciDevNet.
Imagen de Santo Domingo vía Shutterstock